Hoy decidí hacer un elegio a la pereza, despertarme tarde tras visitar las fiestas de Gràcia y dedicarme el día. Era mi primer día des-Konecta-da, libre del precariado del telemárqueting, y por ello vagueé sin fin mientras hacía marujeo en casa e intentaba -infructuosamente- quedar con algún amigx para distraerme. ¡Qué suerte la mía! Nunca el desencuentro fue tan favorable.
Empecé un collage para mi querido Josep Romans y estaba sonando el Verano Fatal de Nacho Vegas con Christina Rosenvinge, cuando empecé a recibir notificaciones preguntando si estaba bien tras el atropello del terror que acababa de suceder en las Ramblas. Vivo en el Raval, Ciutat Vella, el Chino como lo conocen algunos, en el medio del meollo. Sitiada en esa caja de cerillas que es mi hogar, acabé el collage con dos palabras de mi lectura actual: Barcelona Rebelde de Guillem Martínez.
Gracias a todos los que habéis contactado conmigo, gracias por tanto amor.
Con los helicópteros sobrevolando y el amor a Barcelona a flor de piel me despido.
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| había escandalizado |
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